¡Hola chicas! ¿Cómo lleváis la semana? ¡Yo estoy liadísima con mi creación carnavalera! Pero he podido sacar un ratito para mostraros el look de hoy, que está basado en un bonito pañuelo. ¡Cómo viste!
Como os he explicado en otras ocasiones, cuando queremos darle más cuerpo a un pañuelo, basta con ponerlo junto con otro. Si uno de ellos tiene motivos, queda genial combinarlo con otro liso. Siempre con colores de la misma gama. Y poner dos lisos juntos también queda muy bien, porque se consigue una combinación de colores deseada, que posiblemente no tengamos en una bufanda. En el caso de hoy, he elegido dos pañuelos en tonos verdes que puestos quedan como si fuera uno solo, pero reversible. Ambos los compré en un mercado solidario, en Madrid.
Para proteger mis manos de estos días de frío que tenemos, he cogido unos guantes de piel vuelta, en la misma gama de colores que los pañuelos. Son de Carrefour.
Con el verde botella quedan súper bien los accesorios dorados (plateados... yo no los pondría), pero hoy he decidido seguir jugando con el verde. Así pues, he puesto un anillo en forma de flor de Bijou Brigitte y unos pendientes en forma de estrella que ya os sonarán por mi anterior entrada, pero... ¡ojo! ¡estos son verdes!
Como os he comentado antes, el protagonista de hoy ha sido el cuello. Con abrigo destaca el vistoso pañuelo, pero... ¿y cuando me lo quito? ¿por qué quedarme con un look soso? Pues para marcar estilo nada mejor que un colgante llamativo. ¡Con este bonito detalle nunca se pasa desapercibida!
En su día realicé una entrada en relación a los perfumes y en ella os comentaba que os iría enseñando mis adquisiciones. Pues he aquí la última (he de confesar que no la conocía, pero al oler la muestra me ha encantado): Eau Fraiche de Leonard, París. Es súper fresca y no se evapora rápido. Además, me han regalado... ¡un paraguas transparente! Tenía muchísimas ganas de uno así y me ha hecho una ilusión... ¡Es genial, porque me cobijaré de la lluvia, pero el paraguas no me quitará nada de claridad, ni de visión! ¡Es perfecto!
Os despido por hoy. ¡Mañana ya viernes! ¡Ha pasado la semana volando!
Besis.
Como os he explicado en otras ocasiones, cuando queremos darle más cuerpo a un pañuelo, basta con ponerlo junto con otro. Si uno de ellos tiene motivos, queda genial combinarlo con otro liso. Siempre con colores de la misma gama. Y poner dos lisos juntos también queda muy bien, porque se consigue una combinación de colores deseada, que posiblemente no tengamos en una bufanda. En el caso de hoy, he elegido dos pañuelos en tonos verdes que puestos quedan como si fuera uno solo, pero reversible. Ambos los compré en un mercado solidario, en Madrid.
Bajo el abrigo negro de Mango, visto un short también negro y un jersey básico color verde botella, ambas piezas de Zara. Como veis el protagonista del estilismo de hoy es el pañuelo. Los leotardos son de Calzedonia.
Complemento el look con botas y bolso del mismo color que el jersey. El bolso es de La Sacoche, de la temporada pasada; y las botas, de hace dos, las compré en Marina, en la calle Fuencarral, de Madrid.
Para proteger mis manos de estos días de frío que tenemos, he cogido unos guantes de piel vuelta, en la misma gama de colores que los pañuelos. Son de Carrefour.
Con el verde botella quedan súper bien los accesorios dorados (plateados... yo no los pondría), pero hoy he decidido seguir jugando con el verde. Así pues, he puesto un anillo en forma de flor de Bijou Brigitte y unos pendientes en forma de estrella que ya os sonarán por mi anterior entrada, pero... ¡ojo! ¡estos son verdes!
Como os he comentado antes, el protagonista de hoy ha sido el cuello. Con abrigo destaca el vistoso pañuelo, pero... ¿y cuando me lo quito? ¿por qué quedarme con un look soso? Pues para marcar estilo nada mejor que un colgante llamativo. ¡Con este bonito detalle nunca se pasa desapercibida!
En su día realicé una entrada en relación a los perfumes y en ella os comentaba que os iría enseñando mis adquisiciones. Pues he aquí la última (he de confesar que no la conocía, pero al oler la muestra me ha encantado): Eau Fraiche de Leonard, París. Es súper fresca y no se evapora rápido. Además, me han regalado... ¡un paraguas transparente! Tenía muchísimas ganas de uno así y me ha hecho una ilusión... ¡Es genial, porque me cobijaré de la lluvia, pero el paraguas no me quitará nada de claridad, ni de visión! ¡Es perfecto!
Os despido por hoy. ¡Mañana ya viernes! ¡Ha pasado la semana volando!
Besis.
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